El recorrido de la senda del río verde transcurre por un paraje de una belleza tal que nunca hubiera imaginado, dado que el inicio arranca en un punto tan desolador, que cualquiera que no supiera de su existencia, como era mi caso, jamás podría imaginar que un lugar tan bello pueda existir en estos parajes. Yo lo he descubierto gracias a mis compañeros del club Senderos de Granada, ellos me están descubriendo zonas y parajes de esta zona de España realmente bellos y espectaculares.
Salimos de granada por la autovía que une la capital con la costa y una vez pasado el puerto del Suspiro del Moro nos desviaremos por la siguiente salida que nos indica Padul, En el cruce fuera de la autovía que indica Padul hacia la izquierda nosotros giraremos a la derecha para ir a coger a unos 600 mts.mas adelante la antigua carretera que unía Granada con Almuñecar, continuaremos y a unos 24 kms dejaremos a nuestra derecha el mesón Los Prados de Lopera que nos puede servir de referencia , continuamos y observaremos como la carretera inicia un descenso por la derecha de un gran farallón calizo que nos bajará a nuestro destino de hoy,unos 3,5kms desde el citado mesón y que reconoceremos porque la carretera se aparta de la roca pasando en este punto sobre el Barranco de la Arroba . A nuestra izquierda, veremos un pequeño claro donde aparcar los vehículos y justo enfrente, esto es a la derecha de la carretera en sentido de la costa, sale el sendero que nos llevará a Rio Verde.
Iniciaremos la marcha en este punto, aquí el paisaje es poco atractivo, sobre todo debido a que esta zona sufrió un grave incendio que lo asoló y del cual aun no se ha recuperado. los arboles desaparecieron y dejaaron la roca caliza al descubierto. Caminaremos unos dos kilómetros por una senda bien trazada y que en los tramos más peligrosos, han sido colocadas barandillas o quitamiedos de madera, a medida que avanzamos la senda va bordeando y adaptándose al terreno y nos vamos acercándonos a unos barrancos cuyas paredes erosionadas por el agua, adquieren formas extrañas y bellas, llenos de una vegetación exuberante.
Cascada de los troncos petrificados |
El último tramo de la senda inicia un descenso vertiginoso al mismo tiempo que se retuerce zigzagueante por la roca salvando una gran altura en muy poco trecho, gracias a un escalonado, que alguien construyó con buen criterio, pero con poca mesura, pues la altura entre escalones dicen que debía de tener unas largas piernas, superior a las del resto de los mortales.
Pantaneta |
Senda del barranco del lagarto |
Un saludo a todos los senderistas y aficionados a la montaña que me seguís.